Adriana Agudo Vicci. Especial Grupocieg
@_mochiladeemociones
Estar lejos de casa hace mucho más difícil vivir el duelo por la pérdida física de un ser querido.
Si estás viviendo esta dolorosa experiencia, es posible que a ratos te sorprendas por este especial contexto que te ha tocado vivir y que, años atrás, seguramente, te resultaría impensable.
Esta situación te ha mostrado, una vez más, de qué estás hecho.
Sobreviviste ese momento y te ha tocado vivirlo con una rutina en la nueva senda que te has propuesto, con la ilusión de otros proyectos, la compañía de nuevas amistades y, por supuesto, el dolor de la ausencia. Porque esa o esas personas, ocuparon un papel transcendental en lo que fuiste y en lo que eres.
Vivir el duelo es vivir un largo proceso natural de profundo impacto emocional que todos viviremos más de una vez. Y que, en fechas como estas, los días previos, posteriores y el mismo Día de los muertos, lo sientes con más intensidad.
El Día de los muertos es una tradición que nos acompaña desde muy pequeños. En esta fecha se conmemora el recuerdo de quienes te hicieron vivir momentos únicos.Los cementerios se llenan de visitantes, de flores, de reuniones familiares. Se llenan de amor. Porque es el amor lo que ocasiona el dolor por la pérdida de nuestros familiares.
Si ahora no puedes estar allí, piensa que nada ha cambiado pues el amor y el recuerdo trascienden fronteras.
Déjate llevar y deja salir esas emociones. Y más todavía, si te fuera posible, comparte lo que sientes con alguien de tu confianza. Comparte la satisfacción de haber vivido una vida con ese ser querido.
La familia que se mantiene en tu país sabe que estarás especialmente sensible. Comparte con ellos, cuéntales cómo te sientes. Escúchalos, acompáñalos.
Y, por otro lado, la comunidad migrante es fuerte y está unida por experiencias compartidas. Muchos pasan por lo mismo, recordando y celebrando a sus seres queridos desde donde estén.
El duelo no tiene un solo camino. Aunque migrar te ha llevado a situaciones únicas, estás haciendo lo posible por recorrerlo con tus ilusiones, desafíos y la memoria de quienes ya no están.
Desde Bienhallados, te acompañamos a celebrar la vida, el recuerdo y la conexión que jamás se rompe, porque el duelo, es al final, amor.
Ahora que no estás en tu país de origen ¿recuerdas alguna tradición o ritual de ese día en especial?
Ahora que no estás allá ¿cómo conmemoras el recuerdo de ese amor tan grande que físicamente ya no puede acompañarte?
El contenido de los artículos de BienEstar allá donde vayas, son meramente orientativos. Recomendamos, en caso de requerirlo, el asesoramiento directo con un profesional en el área.
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